Te veo y mi mundo se mueve,

todo cambia, es diferente.

Mientras estas tu, nada es igual.

Es especial, realmente especial

y solo porque tu estas aquí.

No me abandones, no podría soportarlo

te perseguiría hasta el infierno si es necesario.

Contigo.

¿Normal? Lo normal es aburrido.

Mientras sea contigo

puedo pasar un infierno.

Lo único que necesito,

es que estas aquí conmigo.

Cada segundo que pasamos juntos

es mucho mejor, interesante, mas especial.

Todo se vuelve especial contigo,

porque tu eres especial conmigo.

Metida en un mundo de fantasía es como vivo yo,

disfrutando de cada minuto imaginario

con mis personajes inventados.

Paso cada segundo del día pensando en algo irreal

pero, ¿Y eso que importa?

La felicidad viene de algo especial,

esto lo es, mi especial imanación.

Corro por verdes prados,

rodeada de todas mis invenciones.

Cada segundo que pasa lo disfruto mas y mas.

Llámenme loca si así lo quieren,

si ser feliz es estarlo, pues si, lo estoy.

Pienso en ti.

Pienso en ti, día y noche,

cuando como, cuando duermo,

cuando estoy sola y acompañada,

ya sea por ti o por alguien mas.

Tu eres lo único en mi mente,

las veinticuatro horas del día, 

tu, y solo tu.

Cuando estamos juntos,

me siento completa

me siento feliz, única.

Aprecio cada segundo que paso contigo

y odio cada uno que me pierdo.

Eres todo para mi,

todo lo que podría soñar y mas,

aun mas de lo que imagine.

Pienso en ti,

mas de lo que pienso en mi.

Cada noche.

Cada noche, recostada en mi cama

pienso en ti, en tus ojos.

Cada noche, mirando el techo,

recuerdo el roce de tus manos.

Cada noche mientras hablo conmigo misma,

extraño todo de ti.

Extraño la dupla, tu y yo,

algo que se perdió.

Te extraño a ti,

tanto como me extraño a mi,

cuando tu estabas conmigo,

esta no soy yo.

Extraño los tiempos felices.

Un cielo lluvioso.

Veo el cielo nublado,

las gotas caen,

mojan mi rostro,

Se mezclan con mi llanto.

Sorprendentemente,

mis lágrimas son de felicidad.

Ese recuerdo invade mi mente,

tu rostro frente al mio.

Me confesaste tus sentimientos,

yo lloraba de alegría,

nos queríamos, nos amábamos.

Me pediste mi mano.

Nos casamos, tuvimos hijos y morimos.

Aun después de eso,

seguimos juntos,

amándonos,

como ese día lluvioso.

Lo mereces.

Esta soy yo, esta cosa que ves,

no puedo cambiarlo, 

por mas que lo intente.

Rompo lo que toco,

quiero tocarte, pero no puedo.

Me aterra romper esa alma,

pura y limpia,

se merece mucho mas,

merece todo lo que da,

y yo no puedo darte nada.

Solo dolor y sufrimiento.

Quiero estar contigo pero,

no quiero quebrarte, quebrar tu espíritu.

Aunque digas que me amas,

y sabes que yo también lo hago,

esto es imposible, voy a lastimarte.

No podría perdonarmelo,

si lo hiciera debería morir.

Por eso, sigue tu camino,

no mires atrás.

Recuerdos.

Recuerdo cada parte de ti,

cada sonrisa que me dedicaste,

aunque fueran solo imaginaciones.

Recuerdo cada palabra salida de tu boca,

cada cosa que hiciste,

buena o mala, las admiro todas.

Recuerdo tu felicidad, 

esta marcada en mi corazón,

imposible de borrar.

La veo cada vez que pasas frente a mi,

cada vez que vuelves a sonreír,

cada vez que eres feliz, sin mi.

Así debe ser, no eres tu, soy yo.

Robo la felicidad, 

con la tuya no pasara.

Te veré de lejos,

mientras eres feliz,

y seré feliz de verte sonriendo.

En sueños.

Cuando pienso en esos pequeños ojos,

que explican tus raíces, 

esos labios tan perfectos,

que jamas podre besar,

tu sonrisa, me vuelve loca,

ese bello rostro se aparece en mis sueños.

¿Por que esto es tan cruel?

Alguien tan famoso,

nunca se fijaría en alguien como yo,

una chica normal y sin valor.

Es imposible este amor,

lo único que queda

es seguir admirándote en sueños,

a escondidas, en un rincón de mi cabeza.

Soñar con esa mirada,

que promete cumplir mis sueños.

Lo único que deseo,

es estar contigo,

realmente no en sueños.

Esta chica extraña.

Quiero que me mires y me digas,

¿Que es lo que ves?

¿Tal vez una chica extraña?

Puede que así sea,

después de todo lo soy.

Pero, hay algo que esta chica extraña debe decir,

algo que debe confesar,

se podría decir que es su mas grande secreto.

Esta chica extraña tiene sentimientos,

los encierra dentro suyo para protegerse

y proteger al resto.

Pero, lo cierto es que,

sus sentimientos son muy fuertes,

la pasión numero uno se cree.

Y son gracias a ti, 

esta chica extraña,

 te ama locamente.

Me aceptas.

Tu eres mi vida, mi alma, mi todo.

Conoces cada cosa de mi, 

incluso mis defectos,

y, aun así, me aceptas.

Conoces mi malhumor,

mis ataques de histeria,

mi locura, y, aun así,

me aceptas.

Aceptas mi amor retorcido y complicado,

aceptas mis sentimientos buenos y malos.

Quiero que hoy me aceptes en este presente,

te regalo mi corazón en una caja,

haz con el lo que te plazca,

te pertenece, te pertenezco.

Pequeños ojos.

En tu mirada descubrí,

mis sentimientos al fin.
Esos pequeños ojos rasgados
llenaron mi corazón.
Me llenaron de coraje, de valor.
Gracias a esos pequeños ojos
pude notar lo que siento.
Gracias a esos pequeños ojos
puedo confesarte hoy,
aquí y ahora, con toda franqueza,
la cantidad de cosas que me haces sentir.
La luz, el calor, el brillo, el amor,
son todas cosas que conocí en tu mirada,

en esos pequeños ojos

que llenaron mi alma.

Lagrimas.

Y, así fue

aquel ultimo día
cuando me despedí de ti.
Tu llorabas bajo la lluvia,
yo te abrazaba con fuerza
tus lagrimas recorrían esas mejillas rosadas
hoy pálidas.
Te dije adiós con una sonrisa forzada,
mi corazón no quería irse
pero mi mente debía hacerlo.
Tenia que irme, dejar todo atrás,
tu eras ese todo.
Lo siento!Si hay algo de lo que me arrepiento,
fue dejarte, el peor error.
Sabia que lo era y volví,
pero era tarde.
Al llegar fui a verte,
tu cuerpo frío y pálido me recibió,
tus mejillas ya no eran rosadas.
Ese día las lagrimas eran mías.